Firma invitada: ANGEL SANTOVERDE
Soy presidente del Partido por la Dignidad Animal, Vegetal y Mineral (PADAVEM)
Asomo, por vez primera, mi cara en este blog tras una larga temporada de súplicas a su anfitrión para que me permitiera exponer ante ustedes mi mensaje ecologista. Y la resistencia del anfitrión a permitir mi comparecencia en este blog se ha resquebrajado, únicamente, cuando una ola de indignación y alarma se ha extendido por toda Genomia a resultas de un estudio científico que ha demostrado las conductas sexualmente inapropiadas de los gallos con sus congéneres las gallinas.
Antes de entrar en materia, permítanme que me presente: soy ANGEL SANTOVERDE, presidente del Partido por la Dignidad Animal, Vegetal y Mineral (PADAVEM) que recordarán ustedes formaba parte de la tríada de partidos políticos incapaces de alcanzar, en primera vuelta, un pacto de legislatura debido, entre otras razones, a una de las exigencias pétreas de mi Partido. Pero, como debemos justificar las cuantiosas subvenciones públicas de recibimos, las miembras y los miembros del PADAVEM nos hemos embarcado en una auténtica cruzada en defensa de una causa vital para el futuro de las ciudadanas y ciudadanos de GENOMIA, esto es, de nuestras compatriotas y compatriotos.
“Vida sexual sana de las aves domésticas”: un tratado clásico de zoología de KO-PI-ON
Y nuestra campaña comenzó cuando un buen día cayó en nuestras manos el tratado clásico de zoología “Vida sexual sana de las aves domésticas” de KO-PI-ON, un reputado especialista internacional en la zoología aviar, de origen asiático, aunque nacionalizado holandés. Desde su cátedra de biología en Leiden, KO-PI-ON ha alumbrado cientos de artículos científicos y numerosas monografías en la materia; pero su obra cumbre, la que le precede allí a donde vaya, es su monumental tratado “Vida sexual sana de las aves domésticas” que –de una manera análoga a lo que hacía con las humanas y los humanos el famoso libro de un psiquiatra de la España de los años sesenta del pasado siglo XX- explica las costumbres de las aves domésticas, algunas veces llamadas –con evidente ánimo difamatorio- “aves de corral”.
El tratado no es precisamente original, sino una especie de “collage” ordenado didácticamente de retazos de 55 obras de otros autores de los cinco continentes porque, haciendo honor a su nombre legendario, el maestro KO-PI-ON ha plagiado. Son 55 tratados avícolas de autores estadounidenses, japoneses, austriacos, senegaleses, indonesios y así hasta llegar a 55. Sus intertextualzaciones tenían la precisión y la donosura de un fusilamiento –literario, claro esta- al amanecer. Hasta el punto de que el conocido programa anti-plagio “Te pillé” se fundió al aplicarlos sobre el famoso tratado y el algoritmo que lo sustentaba lanzo un mensaje criptográfico que los expertos tradujeron al lenguaje natural como un: “ya no puedo más”, al modo de la famosa canción del cantante melódico recientemente fallecido.
El Protocolo de Aproximación del Gallo (PAGA) y el Consentimiento Informado de la Gallina (CINGA)
Pues bien, ante el escándalo que habían levantado las reiteradas agresiones sexuales de los gallos a las gallinas entre la ciudadanía progresista de Genomia, en mi condición de presidente del PADAVEM me vi obligado a contactar con el profesor KO-PI-ON para encargarle un informe que sirviera para solventar tan grave crisis. Y el famoso sabio, tras una estancia de 3 meses y 1 día en un hotel de superlujo de la capital de Genomia y previo pago de 500.000 euros (+ IVA) nos entregó 10 páginas de informe, a doble espacio, que nos guiaron –cual faro en la oscuridad- en la solución del problema acuciante que robaba nuestros sueños. Como es lógico y propio del método científico, la solución recomendaba que se adoptaran sendas actuaciones sobre las dos partes implicadas de modo tal que: los gallos deberían seguir un Protocolo de Aproximación a las gallinas (el PAGA) que garantizara los derechos fundamentales de estas últimas, quienes debían ratificar un documento previo de su Consentimiento Informado (el CINGA) que verificara su libre voluntad de cohabitar –o “conocerse” en términos bíblicos- con el gallo respectivo. Y todo ello fue posible gracias a la digitalización aviar, con la implantación de chips en los cerebros de las aves que garantizaban su comportamiento adecuado.
La princesa zoóloga y los encuentros del PASAVEM sobre filosofía animal
La coincidencia en la capital de Genomia de una princesa europea bien conocida por su afición a la zoología y del maestro KO-PI-ON fue ocasión pintiparada para que el Partido que presido organizara unos “Encuentros zoológicos sobre filosofía animal” (absténgase la lectora o el lector de inferir deducción de lo que es mero oxímoron). En ellos, se celebraron varias mesas redondas de conversaciones –en profundidad (porque, para superficialidades, ya están los diálogos meteorológicos de ascensor)- sobre la influencia de la iniciativa del PASADAVEM en los proyectos vitales de las gallinas y otros temas de semejante –e incluso mayor- transcendencia social.